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Etiquetas Durables

 

Lo crea o no, hay una ciencia para elegir el adhesivo de etiquetas adecuado. La química de un adhesivo reacciona de forma diferente a la química de los distintos tipos de superficies.

 

Estas diferentes reacciones pueden afectar a su marca de manera profunda. ¿Cómo? Piense en un hermoso cuenco hecho a mano… que tiene que fregar furiosamente para intentar eliminar el adhesivo pegajoso y los trozos de etiqueta que quedan.

 

Lo último que quiere hacer es frustrar a sus clientes con una etiqueta que no funciona como usted y ellos esperan que lo haga. Pero la buena noticia es que este tipo de experiencias frustrantes son 100% evitables, si su proveedor de etiquetas conoce sus adhesivos.

 

En cuanto a los tipos de adhesivos para etiquetas, existen tres opciones: removibles, reposicionables y permanentes. Veamos lo que hay que saber sobre cada uno de ellos.

 

¿Removible? ¿Cuándo?

 

¿Necesita una etiqueta removible? Esa simple petición no suele ser en realidad nada sencilla. Permítanos demostrarlo con una historia:

 

Imagine que quiere poner una etiqueta en un árbol. Le gustaría que la etiqueta se aplicara fácilmente sobre la corteza rugosa y desigual del árbol. También le gustaría que la etiqueta durara años, incluso con el viento, la lluvia y el sol. Y, por último, le gustaría que la etiqueta se retirara limpiamente, sin dejar residuos.

 

Eso es pedirle mucho a la etiqueta. Ahora bien, este es un ejemplo extremo, pero ilustra que hay que tener en cuenta muchos factores a la hora de crear una etiqueta removible.

 

En primer lugar, es importante saber el tiempo que necesita que la etiqueta sea removible. ¿Se aplicará la etiqueta una vez y se dejará sola hasta que se retire, o será necesario poder retirar y volver a aplicar la etiqueta si se aplica accidentalmente de forma torcida? En una situación como esta, no se necesita una etiqueta removible, sino una etiqueta reposicionable (más adelante se hablará de ellas).

 

 

 

 

 

 

Tiempo de retirada

 Es interesante observar que el 99% de los adhesivos adquieren fuerza con el tiempo. En el caso de algunos adhesivos, ese tiempo puede ser relativamente corto; por ejemplo, hay un breve lapso de tiempo entre el momento en que se coloca una etiqueta en una manzana y el momento en que el cliente la retira. Para otros adhesivos, el plazo es mucho más largo, como en el caso de las etiquetas colocadas en utensilios de cocina, artículos de decoración u otros artículos no perecederos que pueden tener que permanecer en un estante de la tienda durante varios meses, pero que deben ser retirados fácilmente cuando los compra el consumidor.

 

Por supuesto, cuanto más caro sea el artículo, más importa esto. Si su producto tiene un valor inferior, puede que no tenga sentido gastar el dinero extra en un adhesivo removible. En este caso, quizá no le importe que su cliente tenga que rascar un poco de adhesivo.

 

 
 

Elección del frontal

¿Alguna vez ha tenido problemas para eliminar los restos de papel que quedan al retirar la etiqueta?

 

Esto ocurre cuando se ha seleccionado el frontal equivocado. Si una etiqueta está hecha con un papel débil, pero con un adhesivo fuerte, normalmente quedarán restos de papel. La mayoría de nosotros hemos tenido la frustrante experiencia de intentar despegar infinitos trocitos de etiqueta de precio de un regalo antes de envolverlo.

 

Una etiqueta de película puede despegarse limpiamente de una superficie, mientras que el mismo adhesivo de una etiqueta de papel habría provocado un desastre de papel triturado y adhesivo. Esto se debe a que el film puede ser lo suficientemente fuerte como para arrastrar el adhesivo cuando se retira, mientras que el papel puede carecer de ese tipo de fuerza interna.

 

Cuándo es mejor una etiqueta removible

Algunas situaciones comunes que justifican las etiquetas removibles incluyen:

 

Alimentos: Cuando se aplica una etiqueta a un alimento, debe poder retirarse limpiamente de la superficie del mismo. Nadie quiere comer el adhesivo que queda en los tomates o las peras.

 

Etiquetas de productos y precios: Nada estropea más un marco de fotos, una bonita vajilla o un bonito cuaderno de notas que una etiqueta «removible» que deja un contorno pegajoso de lo que fue. Sin embargo, es posible que necesites que la etiqueta permanezca en su sitio durante semanas o meses.

 

Historiales de pacientes u otra información médica: Dado que la información en los centros sanitarios se actualiza con frecuencia, las etiquetas removibles facilitan la organización y la actualización.

 

Etiquetas de registro de mantenimiento del coche: Estas pegatinas deben permanecer intactas durante varios meses y ser capaces de sobrevivir a numerosos lavados antes de ser retiradas.

 

Envases reutilizables: Las marcas con conciencia ecológica (y sus clientes con mentalidad sostenible) reconocen que la reutilización está cerca de la cima de la jerarquía de reducción de residuos de envases de productos, mucho más que el reciclaje, que consume más recursos y energía de lo que se cree. Las etiquetas removibles permiten a sus clientes reutilizar los envases de sus productos como un jarrón único, un práctico contenedor o simplemente un objeto de conversación coleccionable. Las etiquetas removibles también pueden prolongar la vida de los productos rellenables, como los limpiadores domésticos, la kombucha o incluso la cerveza artesanal. (Algunos consumidores pueden ser reticentes a reutilizar una botella cubierta de suciedad en la etiqueta).

 

Seguimiento de activos o mantenimiento de registros: Nunca ha sido tan importante hacer un seguimiento del inventario para evitar pérdidas a lo largo de la cadena de suministro. Tampoco ha sido nunca más importante controlar el caos en los agitados entornos sanitarios. Un tipo específico de etiqueta removible -las etiquetas piggyback- ayuda al seguimiento de activos y al mantenimiento de registros. En esencia, las etiquetas dentro de las etiquetas, permiten al personal trasladar rápidamente los códigos de barras y otra información de seguimiento de una superficie a otra.

 

Etiquetas reposicionables

Las etiquetas reposicionables suelen utilizar un adhesivo acrílico que puede retirarse fácilmente y volver a aplicarse durante un breve periodo de tiempo tras su aplicación. Esto ayuda a garantizar que el error humano al aplicar la etiqueta a mano no dé lugar a un producto completamente chapucero. La capacidad de reposicionar estas etiquetas es una función de la química de los adhesivos acrílicos y del proceso por el que pasa el adhesivo para lograr una unión con la superficie de aplicación.

 

Al comprar cualquier etiqueta, recomendamos que se pruebe la combinación de adhesivo y material de soporte en la superficie de aplicación durante 72 horas. Esto es especialmente importante cuando se requiere reposicionamiento, para que pueda ver la facilidad con la que se retira y se vuelve a aplicar. Esto le evitará seleccionar una etiqueta que no se adapte a sus fines.

 

Etiquetas permanentes

¿Espera que su etiqueta permanezca durante mucho tiempo? Entonces lo ha adivinado, probablemente necesite una etiqueta permanente. Al igual que en el caso de las etiquetas removibles y reposicionables, hay muchos factores que deben tenerse en cuenta a la hora de elegirlas:

 

¿La etiqueta estará en el exterior y expuesta a los elementos, como en maquinaria pesada o en señalización exterior?

¿Se manipulará la etiqueta con frecuencia?

¿Entrará en contacto con productos de limpieza u otros disolventes?

¿Cuál es la vida útil del producto y cuánto tiempo debe durar la etiqueta?

¿A qué temperaturas estará expuesta la etiqueta, tanto durante su aplicación como durante su uso? Por ejemplo, ¿se aplicará la etiqueta a un recipiente de bebidas que podría estar sumergido en hielo, o la etiqueta pasará la mayor parte de su vida en condiciones de temperatura ambiente estándar?

Cuándo puede ser mejor una etiqueta permanente

Cuando los productos requieren una seguridad adicional: Cuando quiera evitar que las personas equivocadas abran sus productos -o quiera saber cuándo alguien lo ha intentado-, necesita una etiqueta que no sea fácil de quitar o sustituir. Las etiquetas a prueba de manipulaciones y con evidencia de manipulación son un subconjunto de etiquetas permanentes diseñadas para proteger la autenticidad de un producto, evitar el uso indebido y advertir a los consumidores sobre contenidos contaminados. (En el caso de los productos farmacéuticos, las etiquetas a prueba de manipulaciones salvan literalmente vidas).

 

Etiquetas para exteriores: La lluvia, el calor, los cambios frecuentes de temperatura y la luz solar pueden causar estragos en una etiqueta. Si quiere que su etiqueta dure mucho tiempo en el exterior, tendrá que elegir materiales, tintas y adhesivos que puedan soportar las inclemencias del tiempo. Su impresor de etiquetas puede ayudarle a diseñar (y probar) una etiqueta duradera que esté hecha para durar.

 

Etiquetas de advertencia: Las etiquetas de advertencia suelen ser obligatorias y están sujetas a normativas específicas que regulan su color, lenguaje y diseño. Las etiquetas de advertencia también suelen estar sujetas a condiciones duras, especialmente en entornos industriales, donde los productos químicos cáusticos, el calor intenso y las piezas móviles pueden hacer que las etiquetas sean ilegibles. Las etiquetas de advertencia duraderas y permanentes garantizan la seguridad de los trabajadores y los clientes, y mantienen a las empresas en el lado correcto de la ley.

 

Etiquetas químicas: Las etiquetas de productos químicos son una clase especial de etiquetas de advertencia sujetas al Sistema Globalmente Armonizado de Clasificación y Etiquetado de Productos Químicos (SGA). Las etiquetas que cumplen con el SGA deben incluir pictogramas de peligro, una palabra de advertencia y una declaración de peligro. Pero sobre todo, para cumplir su función de salvar vidas, las etiquetas de productos químicos deben resistir la desfiguración o la destrucción.

 

Etiquetas para automóviles: Los coches y camiones no sólo son piezas de maquinaria pesada con piezas móviles, superficies calientes y productos químicos corrosivos, sino que funcionan casi exclusivamente en el exterior. Esto los convierte en un gran desafío para todas las etiquetas, excepto las más resistentes. Las etiquetas para automóviles deben ser permanentes y duraderas (excepto, por supuesto, las etiquetas temporales para automóviles, como las calcomanías de mantenimiento mencionadas anteriormente).

 

Al estar informado sobre las diferentes opciones de adhesivos para etiquetas disponibles, podrá tomar la decisión correcta y segura para su próximo proyecto de etiquetas. En caso de duda, Etqro Etiquetas está aquí para responder a cualquier pregunta que tenga. Estaremos encantados de guiarle en la elección de la etiqueta adecuada para su próximo lanzamiento.

 

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